Los efectos de los radares de velocidad

Los radares de velocidad son cada vez más usados en diferentes países, siendo estos una excelente forma de controlar la velocidad de los conductores, de allí, que los mismos se posicionen en zonas donde los conductores deben conducir a baja velocidad. Pero aunado a lo anterior, los radares son una forma de tomar conciencia que ha surtido mucho efecto.

Efecto social de los radares de velocidad

Uno de los principales efectos de los radares es que los conductores regulan su conducta de conformidad con las normas de tránsito. Por ello, son excelentes formas de regulación que obligan al conductor a bajar la velocidad y a ajustarse a la velocidad máxima permitida.

Si bien, muchas personas usan interventores de radar de velocidad, para burlar los controles, si son capturados con estos medios fraudulentos son duramente sancionados.

Efecto individual

Es importante que los conductores de forma individual respeten las normas, pero a su vez, que sean sancionados cuando excedan la velocidad permitida. Así que, cuando el radar verifica que el conductor va a exceso de velocidad, simplemente el radar avisará a la autoridad competente y el conductor será multado. Esta es una forma de aprender de forma individual a respetar los parámetros de velocidad establecidos.

Más que sancionar es crear conciencia

Ahora bien, más que sancionar lo que se debe buscar es generar conciencia y educar el conductor. El hecho que una zona específica este controlada por radares de velocidad, no es por mero capricho o por el afán del Estado de recaudar dinero mediante la imposición de multas. Sino es una forma de dar a conocer al conductor, que hay lugares donde debe tener especial precaución, ya sea, porque es una zona escolar, una zona de alto tráfico o una zona residencial.

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