El estrés tecnológico del conductor: solo usa la tecnología con la que puedas lidiar

Hoy en día el uso de la tecnología al volante se ha manifestado en multiplicidad de elementos electrónicos que hacen más fácil la conducción, ya que, alertan los sentidos, de forma tal, que el conductor pueda ser previsivo a ciertos obstáculos que se le pueden presentar en el camino, pero, ¿qué sucede cuando se agrega mucha tecnología?

Cuándo aparece el estrés tecnológico

Cuando el conductor se agobia con tanta tecnología cae en una sobre-estimulación a sus sentidos, lo que degenera en el estrés tecnológico del conductor, siendo en este caso la tecnología, un factor negativo. Si bien, muchas personas incluyen un montón de aparataje tecnológico en su automóvil y logran lidiar muy bien con él, otras personas presentan situaciones de estrés cuando reciben mucha información, la cual los desconcentra.

La desconcentración como consecuencia de la sobre-estimulación

El excesivo uso de las tecnologías al volante produce en algunos casos la desconcentración del conductor, convirtiéndose esta, en más que mecanismos de seguridad, mecanismos que alejan al conductor de la realidad, desconcentrándolo de lo que realmente pasa en el exterior, subsumiéndolo en la programación de una máquina que incluso el conductor desconoce el uso correcto de la misma.

La tecnología no es para todos

Hay que tener en cuenta que la tecnología no es para cualquier tipo de conductor, es solo para los conductores que logren asimilarla y adaptar su conducción a ella, las personas de avanzada edad, prefieren guiarse por los métodos tradicionales de conducción, ya que, no logran establecer conexión con la tecnología, siendo más frecuente en ellos, el estrés tecnológico del conductor.

Por ello, es recomendable que no adquieras de una vez toda la tecnología aplicable a tu vehículo, es preferible que la añadas poco a poco, para que realmente sea útil y te puedas adaptar a ella sin estrés.

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